DERMOCORRECCION AWT

La terapia de ondas acústicas de choque utiliza los propios mecanismos de reparación del cuerpo para recuperar los tejidos. Cuando la celulitis se encuentra en un estado avanzado (grados I, II y III), el sistema vascular linfático no es capaz de devolver una cantidad suficiente de proteínas y productos catabólicos al sistema venoso; por lo tanto, se produce una alta concentración de proteínas, lo que provoca fibrosis y altera las propiedades del tejido.

Las ondas acústicas de choque aumentan la permeabilidad de la membrana celular de forma transitoria, mejorando así el intercambio de estas sustancias entre las células y provocando la rotura de los tabiques fibróticos de la celulitis. De este modo, conseguimos reducir los signos visibles de la celulitis de grado I, II y III.

El objetivo de las ondas vibracionales es estimular el metabolismo, acelerar la eliminación de residuos y aumentar el flujo sanguíneo muscular para favorecer la formación de nuevas fibras y fortalecer los músculos. Durante el tratamiento, los pulsos oscilantes generados producen una vibración de los músculos y en consecuencia, un impacto muy positivo en el flujo linfático, consiguiendo así que todo el tejido adquiera firmeza. El masaje vibratorio completa el tratamiento de ondas acústicas de choque y potencia su efectividad proporcionando además una agradable sensación de bienestar.

La presoterapia es el complemento ideal para potenciar los efectos de este tratamiento específico para la celulitis. Tiene como objetivo estimular el sistema circulatorio y linfático, favoreciendo la eliminación de toxinas de forma natural.